¿Cómo trabaja una ESCO?

Una ESCO es una empresa que ofrece servicios para la identificación e implementación de oportunidades de eficiencia energética y de sustitución en el uso final de fuentes energéticas tradicionales por fuentes de energías renovables. La ESCO actúa así como promotor de proyectos de eficiencia energética por medio del asesoramiento a los usuarios en todas las fases de desarrollo de los proyectos: desde el diseño, la identificación de mecanismos de financiamiento, implementación y puesta en operación de las medidas, seguimiento y verificación de resultados.

Adicionalmente, algunas ESCO ofrecen la posibilidad de desarrollar proyectos en el marco de contratos remunerados por desempeño. Bajo esta modalidad la inversión es realizada total o parcialmente por la ESCO y la remuneración de estos servicios y de la infraestructura instalada es cubierta por hasta el 100 % de ahorros generados con las medidas implementadas durante un período determinado.

A los efectos de comprender los flujos de dinero que tienen lugar en un proyecto de estas características se puede dividir el proceso de trabajo en tres etapas:

1. Antes de la implementación del proyecto. Se ha identificado el área de oportunidad y elaborado el proyecto pero aún no se han realizado inversiones y, por lo tanto, no se ha aprovechado el potencial de ahorros energéticos y económicos.
2. Duración del contrato. Una vez realizado el proyecto, y durante un tiempo limitado, los ahorros son compartidos entre el usuario y la ESCO, para la recuperación de su inversión.
3. Vida útil después del período de contrato. Todos los ahorros generados son en beneficio del usuario de energía quien se responsabiliza de la operación y mantenimiento; ya no existe relación contractual.